Las DSLR están compuestas por un lente, un espejo, un obturador, un pentaprisma, un visor y un sensor fotosensible.
FUNCIONAMIENTO.
Las DSLR funcionan, básicamente hablando, de la misma manera que las SLR, por medio de luz que entra atravez del lente hasta un sensor, a diferencia de las SLR que usan película. La forma de componer la imagen es la misma, ya que ambas tienen un espejo y un pentaprisma que permite ver la imagen en el visor o view finder.
Los sensores a diferencia de las películas, funcionan electrónicamente, enviando la información capturada a un dispositivo de almacenamiento, ya sea una memoria SD o COMPACT FLASH.
Los sensores se dividen en dos clases, los CCD y los CMOS, el dilema de cual es mejor se ha llevado durante años, pero la realidad es que en la actualidad los sensores CMOS son mejores que los CCD. Aunque no siempre fue así, los sensores CMOS tenían una menor calidad de imagen, pero lo compensaban con la rapidez para procesarlas, ya que lo hacían desde el interior del sensor, a diferencia de los CCD que necesitaban un procesador externo para lograrlo, lo que se traducía en costos de producción mas elevados.
Al ver esto, los fabricantes decidieron optar por los sensores CMOS, que al día de hoy, son los que mayor comercialización tienen. Los sensores CMOS no fueron introducidos en una reflex de buenas a primeras, los fabricantes los implementaron, al principio, en las cámaras compactas, donde la calidad no era tan importante y a base de eso comenzaron a desarrollarlos hasta el punto de poder ponerlos en un poderoso cuerpo de DSLR.
Los sensores CMOS llegaron para revolucionar las industria, gracias a ellos, nuestras cámaras tienen un mejor rendimiento, son mas sensibles a la luz y pueden disparar ráfagas de 12 o más cuadros por segundo, además de que pueden grabar video en 720p y 1080p, algunas como la Canon 7D a impresionantes 1000 cuadros por segundo. Increíble ¿no?, jamás hubiéramos imaginado tener una cámara con calidad cinematográfica en un cuerpo del tamaño de una reflex.
Al ver esto, los fabricantes decidieron optar por los sensores CMOS, que al día de hoy, son los que mayor comercialización tienen. Los sensores CMOS no fueron introducidos en una reflex de buenas a primeras, los fabricantes los implementaron, al principio, en las cámaras compactas, donde la calidad no era tan importante y a base de eso comenzaron a desarrollarlos hasta el punto de poder ponerlos en un poderoso cuerpo de DSLR.
Los sensores CMOS llegaron para revolucionar las industria, gracias a ellos, nuestras cámaras tienen un mejor rendimiento, son mas sensibles a la luz y pueden disparar ráfagas de 12 o más cuadros por segundo, además de que pueden grabar video en 720p y 1080p, algunas como la Canon 7D a impresionantes 1000 cuadros por segundo. Increíble ¿no?, jamás hubiéramos imaginado tener una cámara con calidad cinematográfica en un cuerpo del tamaño de una reflex.
Bueno pero ¿cómo funcionan los sensores digitales? Muy sencillo, bueno al menos en papel. Los sensores digitales, al igual que las películas de color, tienen tres receptores de los colores primarios, los famosos RGB o rojo, verde y azul. La luz llega a los fotones, que son pequeñas celdas fotosensibles que se encuentran por millones en el sensor de tu cámara, de ahí se deriva el "pixelaje", cada megapixel equivale a un millón de estas celdas. Al ser expuestas a la luz, al igual que la película a color, cada fotón registra esa cantidad de luz entrante en uno de los RGBs y luego lo envía al procesador del sensor, que es el encargado de traducir estos datos en colores que a su vez serán enviados a la memoria externa de tu cámara y de ahí tomada por la pantalla o DISPLAY para traducir la información y mostrar la imagen que a sido capturada.
La calidad de las imágenes no solo está sujeta a la calidad de sensor, entran otros factores como lo son los lentes, el rendimiento que tengan los sensores a las diferentes condiciones de luz, que tanto ruido generan, la resolución, etc.
Las diferencias que existen entre las SLR y las DSLR son muchas (aunque su funcionamiento es muy similar), pero no por eso significa que unas sean mejor que otras, todo es cuestión de que es lo que quiere el fotógrafo.
Las DSLR tienen la ventaja de que puedes guardar cientos de imagenes en una sola memoria, contra las 12, 24 o 36 que se guardan en el magazine de una película. Además como ya lo mencionaba antes, las DSLR pueden cambiar el ISO cada que sea necesario, permitiendoles trabajar en cualquier condición de luz, cosa que en las SLR tienes que cambiar la película si es que quieres aumentar o disminuir el ISO.
Las DSLR nos permiten tener una vista previa de las imágenes de manera casi instantanea y poder así hacer una elección previa, ademas de tener una idea de como será el resultado impreso o en web. Las SLR por el contrario no nos permiten esa opción, si no que debemos esperar a el procesado de la película (con los riegos que eso implica) para poder ver un negativo y finalmente hacer el positivado para ver la imagen como es. Lo interesante de esto es que el proceso es totalmente manual, hacer contacto con los materiales y estar encerrado en una cuarto con apenas una pequeña lámpara color ámbar o totalmente inmerso en la oscuridad si es que se está trabajando con color, oler los químicos y ver como poco a poco se forma la imagen, que en blanco y negro es muy emocionante, además de obtener resultados de altísima calidad, mismo que los proceso digitales aun no pueden lograr, aunque haya técnicas por ahí afuera como lo es la piezografía (de la que hablaremos después), que prometen resultados increíbles en impresión de blanco y negro digital, pero a costos altísimos.
En resumen, la utilización de las SLR y DSLR son cuestión de gustos, y como todo en la vida, tienen sus pros y sus contras, recuerden que no hay mejor cámara que la que sabes usar, conoce tu cámara y sácale todo el provecho que puedas, se creativo y sal al mundo a disparar ese obturador hasta llenar la memoria o el magazine.
Hasta la próxima.
La calidad de las imágenes no solo está sujeta a la calidad de sensor, entran otros factores como lo son los lentes, el rendimiento que tengan los sensores a las diferentes condiciones de luz, que tanto ruido generan, la resolución, etc.
Las diferencias que existen entre las SLR y las DSLR son muchas (aunque su funcionamiento es muy similar), pero no por eso significa que unas sean mejor que otras, todo es cuestión de que es lo que quiere el fotógrafo.
Las DSLR tienen la ventaja de que puedes guardar cientos de imagenes en una sola memoria, contra las 12, 24 o 36 que se guardan en el magazine de una película. Además como ya lo mencionaba antes, las DSLR pueden cambiar el ISO cada que sea necesario, permitiendoles trabajar en cualquier condición de luz, cosa que en las SLR tienes que cambiar la película si es que quieres aumentar o disminuir el ISO.
Las DSLR nos permiten tener una vista previa de las imágenes de manera casi instantanea y poder así hacer una elección previa, ademas de tener una idea de como será el resultado impreso o en web. Las SLR por el contrario no nos permiten esa opción, si no que debemos esperar a el procesado de la película (con los riegos que eso implica) para poder ver un negativo y finalmente hacer el positivado para ver la imagen como es. Lo interesante de esto es que el proceso es totalmente manual, hacer contacto con los materiales y estar encerrado en una cuarto con apenas una pequeña lámpara color ámbar o totalmente inmerso en la oscuridad si es que se está trabajando con color, oler los químicos y ver como poco a poco se forma la imagen, que en blanco y negro es muy emocionante, además de obtener resultados de altísima calidad, mismo que los proceso digitales aun no pueden lograr, aunque haya técnicas por ahí afuera como lo es la piezografía (de la que hablaremos después), que prometen resultados increíbles en impresión de blanco y negro digital, pero a costos altísimos.
En resumen, la utilización de las SLR y DSLR son cuestión de gustos, y como todo en la vida, tienen sus pros y sus contras, recuerden que no hay mejor cámara que la que sabes usar, conoce tu cámara y sácale todo el provecho que puedas, se creativo y sal al mundo a disparar ese obturador hasta llenar la memoria o el magazine.
Hasta la próxima.
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